RECORDANDO A PELAGIO
Ilma. Sra. Alcaldesa, presidentes de las diferentes asociaciones culturales y deportivas, querida familia y amigos todos de Pelagio.
Buenas tardes. En primer lugar quiero comenzar expresando mi agradecimiento en nombre propio, del Colegio Espíritu Santo y en definitiva, de la Congregación de las Hijas del Patrocinio de María, por tener la ocasión de compartir este emotivo homenaje a nuestro gran amigo y compañero Pelagio Forcada Serrano.
Las palabras que voy a decir no son solamente mías, son fruto de las experiencias vividas por tantas personas que han compartido vida y trabajo con Pelagio y que durante mi tiempo en la congregación me han ido trasmitiendo, hermanas, profesores y amigos.
Son muchos los recuerdos y sentimientos que durante estos días nos han ido aflorando evocando la persona entrañable de Pelagio…, las palabras no llegarán a expresar todo lo que quisiéramos plasmar sobre él y todo el agradecimiento y cariño que fue sembrando a lo largo de los casi 40 años de relación cercana y profesional que tuvimos la suerte de compartir con él.
Baena conoció a Pelagio, o Pelagio conoció y gusto de Baena por el colegio, esos fueron sus inicios, unos inicios que se dilataron en el tiempo. De esta relación nosotros queremos destacar su trabajo excelente como profesor y el conocimiento exhaustivo de su profesión, la cual ejerció con calidad, exigencia y entrega a sus alumnos y a la vez de crecimiento y camino compartido, de amistad y colaboración con los compañeros.
Estaba presente en todos los espacios del colegio: docentes, culturales y festivos, en todos tenía su lugar. Proponiendo, animando y metiendo el hombro en todo lo que se preparaba: teatros, encuentros deportivos, concursos y certámenes, viajes culturales y si me callo reviento, en las paellas donde era el jefe. De ellos destacar el día del Espíritu Santo, en el que entre otras actividades se realiza el clásico partido de futbol profesores-alumnos del cual era el árbitro y siguió siéndolo aun estando jubilado, por esta razón desde el año pasado esta competición lleva su nombre.
Su paso por el colegio ha dejado huella, sus alumnos lo recuerdan con cariño y gratitud, prueba de ello las veces que volvían al colegio a visitarlo aun después de años de haber terminado, también en muchos de los profesores actuales que fueron sus alumnos y que ahora siguen sus pasos como docentes en el colegio. Y como dije al principio todas aquellas religiosas que han contado con él como profesor y amigo.
Nuestro agradecimiento y cariño a él y a su familia, que siempre será parte de la nuestra y nuestro reconocimiento por todo el bien que ha supuesto su vida en su paso por el colegio.
Baena, 6 de noviembre de 2021
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